¿Camino por el sendero de la realización?
Os voy a enseñar cómo definir un camino donde no haya equivocación alguna; primero debéis trabajar en vuestro ser todo lo que ya se ha enseñado en las tertulias anteriores. Después de haber recorrido aquellas formas de ser en Luz pura y absoluta para poder dar Luz por allí al paso de la realización, entonces, ya es aprender cómo discernir si el camino que vais a transitar es de pureza absoluta, de realización sin posibilidad al equívoco.
Si en la verdad estáis tenéis discernimiento de todo vuestro ser en cada momento y circunstancia. Si la fe os habita tenéis la certeza, la firmeza, la claridad y la decisión; si aquello habita en vuestro ser, antes de tomar una decisión mirad a los ojos a aquel ser con el cual vais a tener un camino a seguir desde cualquier orden: amoroso, de materia o de negociación, o de cualquier orden que se vaya a decidir un camino a seguir; cuando a los ojos lo miréis, inmediatamente por vuestros ojos llevad Luz cristalina brillante, fuerte y muy potente; y cuando aquello hagáis en vuestra mente decidle: Os vivo desde Dios, os acojo desde la verdad; si no sois de la Luz para mi ser, de inmediato partid de mi lugar. Amén. Así sea.
Y allí orad una oración de liberación. Y esperad tres días, si en tres días aquel ser no parte, es porque hay posibilidad de obra hacer; pero aquello que hagáis inicialmente, deberá ser sin duda, con fuerza y firmeza; por eso, ya debéis haber estado muy preparado y en unidad con todo aquello que ya se ha trabajado, para poder que haya pureza absoluta y claridad en aquello que hacéis, porque si una mínima duda hay, obra no veréis; debéis estar en la certeza absoluta; sin en la certeza absoluta estáis, entonces, lo que allí veáis a los tres días será de certeza absoluta: si es un camino a seguir o si es un camino a dejar. Si aquello lo hacéis y lo practicáis siempre, entonces, vais a tener caminos firmes, claros y seguros y nunca más volveréis a tener tropiezos.
Así es que os pido hijo mío, hija mía, que observéis vuestra vida; si estáis absorbido por el mundo pasajero, por el mundo ególatra, por las vivencias que distraen por un mundo muy superficial; evaluad cada día de vuestros días cuando el día cierre: si ha sido un día productivo, de amor, de realización, de aprendizaje, de solidaridad con vuestro ser y con otros seres, para que empecéis a mirar un nuevo sendero donde establezcáis caminos claros, firmes y seguros; y empezad a definir vuestra existencia, empezad a definir caminos a recorrer, que veáis que son claros y que os darán dicha y realización; pero escribidlos la noche previa al día siguiente, para que allí se plasme para el día venidero; antes de escribirlos orad primero sentando vuestro cuerpo con coronilla dirigida a los Altos Cielos y allí orad cinco veces oración de liberación y antes de cada oración de liberación decís: Hoy me vivo y hoy me siento desde Dios, hoy me vivo y hoy me siento desde la claridad, hoy me vivo y hoy me siento desde la Alta Creación; creación en mí hago y creación en mí habrá. Amén, amén, amén. Así sea.
Orad allí la oración de liberación y volvéis a decir y orad la oración de liberación y así lo haréis cinco veces, no de una manera robótica, sino viviendo y sintiendo aquello que estáis llevando a vuestras neuronas, a vuestras células, a vuestros códigos genéticos, para que mientras vuestro sueño es, ellas se vayan activando en fuentes de creación.
Y en la mañana siguiente antes de poner pies a piso, arrodillad vuestro cuerpo en vuestro lecho, allí elevad vuestras manos a los Altos Cielos, y decid: Señor Dios Padre Todopoderoso, me consagro a vuestro ser, me entrego a vuestra Luz y por el sendero de la verdad y de la realización transito. Amén, amén, amén. Así sea.
Y ora tres veces oración de liberación viendo allí lo que desea logar y lo que obra va a hacer para ser de realización en aquel camino que ha trazado; y en el día entonces, estará atento y atenta de qué elementos ve, recibe y toma para ir dando construcción a lo que se desea establecer en su camino de existencia. Pero primero debió haber trabajado sus miedos, sus soberbias, sus codicias de poder y de tener, con todo lo que ya he indicado, porque si hay una mínima fuga de estados ególatras o codiciosos o mentirosos, obra no habrá desde la realización ni desde la claridad. Si ya está en un camino depurado con todo lo que ya se ha enseñado en el transcurso de estas enseñanzas, entonces, será que ya todo lo viva y se sienta de claridad y en pureza, para ser de realización de una manera contundente.
Si hay un estado que se está trazando para lograr una obra en su existencia, no debe haber duda absoluta; así vea algo que está muy imposible de lograr, no lo verá imposible, lo verá posible diciendo: Señor mío y Dios mío, por vuestro sendero de la Luz transito y allí en aquel camino vuestro y mío, solamente habrá ayudadores que me guiarán a la solución de esta obra que hoy requiero. Amén, amén, amén. Así sea.
Y allí viendo un camino de la Luz de Dios, donde llegan muchas soluciones, ayudadores y la fuente de la claridad para que obra se haga, allí orará siete veces oración de liberación. Así será que lo haga cada día de sus días. Pero en la cotidianidad deberá estar muy atento y muy atenta de que no haya estados intranquilos, angustiados, desamorosos, codiciosos, ni de gritos, ni de miedos, ni de juicios, ni de críticas; deberá haber un pensamiento, palabras y acciones limpias, puras, de perdón, de entendimiento, de amor, de bondad y de verdad. Ya debió haber trabajado muy bien sus códigos genéticos en limpieza y en pureza; y sí así es, practica todo lo que estoy enseñando para ser de logros inmediatos en el camino de la existencia.
En este vuestro mundo terrenal, vosotros seres humanos unos no tienen mejores suerte que otros, nadie vino a ser más, nadie vino a ser menos; todos llegaron a ser iguales en alegrías, en realización, en dicha, en felicidad; ninguno llegó a quedarse atrás y ninguno llegó a ser de domino hacia otros; todos llegaron a este mundo terrenal desde la Luz de Dios a hacer obra desde la Luz por cada uno; todos llegaron a este mundo terrenal a activar a la máxima expresión la sabiduría y el conocimiento que traen en sus códigos genéticos para así hacer obra por cada uno; y cuando ya en la claridad de la Luz estén hay capacidad para hacer obra por los seres queridos, por los hermanos del mundo y por el planeta.
Llegaron a este mundo terrenal no a vivir estados mundanos, ni mentirosos, ni de lujurias, ni de codicias, ni de poderes que dominan a unos y a otros; no llegaron a este vuestro mundo a eso. Llegaron a este vuestro mundo exclusivamente a despertar y a activar la Luz de la verdad, la Luz de la claridad, la fuente de la realización para ser todos altos constructores de sus vidas, para todos ser capaces de tener un contacto directo con Dios Padre Todopoderoso en voz viva y directa; a eso llegaron a este vuestro mundo. No llegaron a tener estados de necesidades, de miedos, de suplicios, de tristezas, ni de dolor; a eso no llegaron. Llegaron a darse cuenta de que Dios depositó en cada uno, Luz, verdad, vida, claridad, firmeza, decisión y acción; a eso llegaron.
Y al tomar conciencia de aquello inmediatamente cada uno activa la fe en su propio ser y de inmediato entra en unidad con la claridad Divina y por allí, ve muy claro su camino; y allí no hay un estado temeroso de no tener, no hay estado temeroso de no ser, allí solamente hay todo el conocimiento y la sabiduría para encontrar los caminos de solución para lo que necesitan en la obra a realizar. Enseñanza dictada por el Padre Creador, Dios.
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Aliméntate de la sabiduría de las tertulias anteriores que son los primeros pasos para tener el discernimiento de cómo caminar sin equivocación alguna, da click aquí: Tertulias que te conducen por caminos de claridad