NO PERMITAS TRISTEZA, NI DEPRESIÓN

No permitas tristeza ni depresión. Renueva tu ser

Escuchad muy bien esta enseñanza que viene desde la Fuente Divina Padre, para que no más os dejéis engañar por los sentimientos confusos que se despiertan o se activan por la no claridad de vuestro ser, que os lleva a que miedos tengáis en cada día de los días y que os impide ser feliz. Cuando digo no os engañéis, es porque cuando empezáis a tener tristezas, dejáis de ser, perdéis vuestro norte, no entendéis vuestro ser; y a veces, por la forma de pensar y de actuar se activa desde los códigos genéticos estados incapacitantes que le lleva a que no vea un camino claro, de solución desde la Luz y entre en estados afligidos, necesitados de abrigo, de protección, de acompañamiento, de reconocimiento; y allí entonces, deja de ser para entregarle su ser a otros, creyendo que le van a dar alegría, que le van a dar la solución, que le van a entregar caminos claros; y aquello, no es.
No permitas tristeza, ni depresión.

Cuando un ser entra en tristeza es porque no ha entendido su camino, es porque no agradece lo que tiene, lo que vive, lo que ha recibido, lo que ha caminado y entra a veces en autocompasión, se compadece, siente que necesita lo vean como un ser que no puede, y aquello entonces, le impide disfrutar de lo que sí puede, de lo que sí es capaz; y va cerrando su claridad interna; y allí entonces, va entrando en momentos de apagamiento, porque cada día va alimentando: ¡Oh! No deseo aquello, ¡oh! No disfruto de aquello, ¡oh! Para mí todo es igual, nada me apetece, no deseo hablar con nadie, no deseo compartir con aquellos seres, no quiero alimentarme; y entonces, cada vez va alimentando pensamientos donde siente que: ¡Oh! Pobre de mí, lo que me pasa, no siento fuerza; y va alimentando el estado apagado y su capacidad de discernimiento se va cerrando y sus guardianes de Luz que lo acompañan no le pueden ir mostrando el camino, porque va cerrando la conexión con la Divinidad para entender, que, en el camino por la tierra todos los senderos tienen solución.

Y a veces entonces, va llevando a que entre en un estado profundo de lamentos, de reclamos, de estados necesitados, de añoranzas, de miedos, de no entendimientos; y abre la puerta al estado llamado: depresión; donde su ser por sus pensamientos, por sus palabras y por sus actos de rechazo a lo que vive, a lo que siente, a lo que hace, activa en su ser estados apagados, permite que seres antagónicos, que no son de la Luz de Dios, se acomoden en su ser y dirijan sus pensamientos de una manera distorsionada, donde cada vez vaya viendo
un mundo más oscuro, caótico, cerrado, sin soluciones.

La depresión es una desconexión de la vida. La depresión es la apatía por la existencia. La depresión es la no claridad del ser en el hacer. Una persona deprimida, es una persona que no sabe qué quiere, no sabe qué siente, no sabe cuál es el camino a seguir. Una persona deprimida es quien no tiene claridad del entorno que la acompaña; y entonces, no recibe a ninguno con alegría, los ve como enemigos, como no gratos, de no disfrute. Una persona depresiva es quien no tiene un pensamiento claro, y entonces, todo aquello le lleva a que esté apagada, confusa, sin disposición para el hacer, sin claridad para el entender y sin visión para disfrutar los momentos y las circunstancias propias de la existencia, que le lleven a dar aprendizaje, conclusiones, para ser el punto de partida a otros estados de mayor creación.

Cada amanecer tiene una solución. No permitas la tristeza ni la depresión. Transforma tu ser. Sé feliz.

Entended esto que os digo para que no lo permitáis, para que no seáis objeto de manipulación de los seres antagónicos. Entonces, diréis: ¡Oh!, pero he vivido esto muy horrible; ¡oh! Estoy viviendo esto que me ha causado gran dolor; ¡oh! He perdido a mi madre; ¡oh! He perdido a mi señor acompañante de vida; ¡oh! He perdido mi fortuna; ¡oh! Me han maltratado; ¡oh! Me han retirado de mis haceres laborales, me han despedido; tengo razón para estar afligido, para rechazar, para reclamar, para quejarme, para no darle sentido a la vida. Poned mucha atención que nada de aquello es causa para el dolor, para la autocompasión, para despertar el miedo, nada de aquello; porque todo eso, u otros estados que os intranquilicen u os atemoricen, todos, absolutamente todos, siempre tendrán un destello de Luz por dónde transitar para hacer creación desde Dios,
encontrar nuevos horizontes; y siempre, siempre, por siempre, dar solución.

No os mintáis, vinisteis a este mundo de la tierra, solo a activar vuestra Luz, para hacer unidad con la Luz Divina y en vuestro libre albedrío permitir a la Fuente Divina Padre, Madre Celestial, activen en vuestro ser las conexiones para escuchar directamente a los Seres Celestiales y desde allí ser guiados, para hacer obra de Luz en cada uno, y allí hacer obra de liberación, de servicio y ayuda a la humanidad entera, al planeta.

Así es, que no os dejéis confundir. Bajo ninguna circunstancia os dejéis aplastar, intimidar, atemorizar; ni decir: ¡oh! Estoy muy triste, todo se ha cerrado en mi camino; jamás lo digáis, ni siquiera lo penséis, porque aquello no es, no lo permitáis; solamente decid: ¡oh! Estoy viviendo algo que me está entregando posibilidades para empezar a mirar la vida diferente, para empezar a entender estados que quizá antes no había visto y no había percibido y ni siquiera había concebido; pero hoy, entonces, he tenido que vivir estas situaciones, para ver cómo transformo mi forma de pensar, cómo llego a despertar logros, cómo activo mi creación para hacer nuevos caminos desde la Luz, desde la claridad, desde la Divinidad, para bien mío, para bien de mis seres queridos, para bien de la humanidad. ¡Oh! No me voy a afligir. Y continúa haciendo lo siguiente:

1- Se sienta, cierra sus ojos.

2- Y respira profundo, muy profundo y despacio, respira por la nariz el aire en Luz cristalina, diciendo: activo en mí la claridad y la serenidad; sostiene la respiración unos segundos, lo que más pueda sostenerla; y luego, en luz violeta, bota muy despacio por la boca; diciendo: retiro de mí la incapacidad. Lo hace así diez o quince veces.

3- Luego, llena de Luz cristalina su cerebro, y dice: Señor mío y Dios mío que en mí habitáis, activad en mis neuronas la sabiduría y el conocimiento, que desde antes de llegar a este mundo de la tierra me entregasteis; por favor, potenciad en mí aquello, os autorizo, os lo permito, para yo despertar mi sabiduría y mi conocimiento que en mí habita.

4- Y os quedáis allí cinco minutos, sintiendo que se activa la claridad, la sabiduría, el conocimiento y la dirigencia Divina.

5- Pasados estos cinco minutos, no estáis pensando en nada de cómo resolver situaciones, ni orando; solo sintiendo como aquella sabiduría y conocimiento se activa.

6- Luego entonces, activáis la Luz blanca que habita en el corazón, que es la fuente de la verdad; y cuando allí se despierta, sentid que lo que se activa de sabiduría y de conocimiento es en pureza Divina, solo desde la verdad, solo desde la claridad. Y así os quedáis otros cinco minutos sintiendo la Luz cristalina que es sabiduría, que se activa en sabiduría, que está activando la sabiduría en pureza y sintiendo la Luz blanca, verdad; y la Luz cristalina sabiduría en pureza.

7- Luego siente que se activa la Luz azul celeste, que brota de la Fuente creación, que habita en el ombligo, y se siente en unidad con aquellos tres destellos de Luces; con la certeza de que se activa soluciones, caminos nuevos, transformación, entendimiento para un nuevo camino, para nuevos haceres desde la claridad Divina.

8- Luego ora Oración de liberación u Oración Padrenuestro, los que sienta, no menos de cinco, sintiendo la Luz de la oración. Y si es seguidor de la Madre María, ora oración Avemaría.

9- Y siente serenidad en su ser.

10- Luego de haber entrado en serenidad y claridad, escribe: Qué voy a hacer, qué solución voy a buscar, qué caminos voy a tomar.

Si sientes: ¡Oh! No encuentro solución, no veo caminos claros.

Entonces, te dices: No me voy a afligir, no voy a mirar el ayer cuánto dolor me ha causado, cuánto miedo, cuánto me ha limitado y cuánto me ha detenido; ni voy a mirar el mañana: ¡oh! No encuentro el sendero. Voy a mirar el hoy. Se dice y lo siente, así:  hoy estoy en la Luz de Dios, mañana será claro; el ayer no existe, ya no es; vivo el hoy, busco solución. El mañana vendrá desde la Luz de Dios; y ora la oración, la que a bien sienta.

Así será que lo haga, se diga, cada que sienta tristeza, preocupación e intranquilidad; y hará ejercicio, caminará; si ánimo no tiene, se dirá: yo domino mi ser, yo transformo mi camino y saldré a ejercitarme; y recibirá sol. Y se pondrá a hacer actividades que le permita sentirse creador.
Es importante que coma frutas y verduras.

No permitirá: ¡oh! no tengo ánimos, no haré nada; no lo permitirá: Inmediatamente empezará a hacer obra, para que no abra puertas a seres que no son de la Luz de Dios y se acomoden en su ser y le alimenten aquellos sentimientos de impotencia, de incapacidad, de apagamiento. Así de sencillo es.

La tristeza en el ser humano no debe existir. La tristeza es la no claridad del ser, que no se debe alimentar, sino
vivirla como una posibilidad, para hacer en solución, y en crecimiento, y en nueva construcción de
transformación de nuevos aprendizajes.

No quiere decir, que no os podáis afligir por una situación que os lleve a tener pérdidas, o separaciones, o rupturas; podéis vivirlo, sentirlo; pero inmediatamente, entenderlo y transformarlo, no debéis quedaros allí; porque eso es una trampa del estado antagónico; podéis vivir, sentir, reflexionar, tomarlo para aprendizaje y transformarlo en grandes creaciones para crecimiento y dar saltos a los caminos siguientes.

Estar alegre es entender lo que se tiene, valorarlo y agradecerlo.

Leer y practicar el capítulo tres del libro Vivid la Verdad para que os preparéis para el nuevo tiempo del Amor, con las enseñanzas que nos dan allí, nos guían cómo cuidar la mente para tener claridad y no permitir estados intranquilos que nos puedan confundir o desestabilizar. Y si hay algún estado mental alterado, igual nos enseñan cómo salir de ellos, o cómo ayudar a nuestros seres queridos cuando el caso sea. Si deseas adquirir el libro lo puedes solicitar por el correo terapiasparaseryvivirmejor@gmail.com

Conoce el libro en el siguiente enlace:

Vivid la Verdad para que os preparéis para el nuevo tiempo del Amor

 

Psicóloga Maria Luz

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4 Responses

  1. Excelentes palabras que recargan el alma de fortaleza sabiduría coraje y amor propio que le devuelve el sentido de la vida con una luz de esperanza

  2. Muchas gracias por este regalo que nos brindas a través de este trabajo literario, me llega al alma y en el momento perfecto.

    Namaste

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